PaNDoRa

A mediados de junio de 2007, Samu y yo llegamos a la conclusión de que habia ganas y economía para tener otras 4 patas en casa. Cuando se enteró Isabel la dueña de Musetta me hizo contactar con Begoña, la chica que encontró a Pandora, una preciosa braco alemán color chocolate que estaba muerta de miedo y de frío frente a la puerta de su casa. Allí estaba, saliendo de la consulta del veterinario cuando fuimos a por ella. Al ver a Samu se lanzó a sus brazos. Cuando adoptamos a Pandora estaba magullada por todas partes y llena de heridas. Había sido víctima de la mala sangre de algún mal nacido, pero hoy despues de un año, de muchos cuidados, muchos mimos y muchas gamberradas se puede decir que esta personaje esta sana y féliz. Begoña antes de encontrarle dueños decidió llamarla "Mía" pero ese nombre no nos hacia mucho tilín, asique una tarde nos reunimos los dueños de los perros y debatimos sobre cuál seria el mejor nombre. Victor, el dueño de Sandy miró hacia la acera de enfrente y preguntó: -Por que no la llamais Pandora?. Pues asi se llamó debido a la cantidad de noches que mi hemana y yo pasabamos en ese bar. Victor fue quien bautizó a Pandora aquella tarde. Ella se caracteriza porque además de ser testaruda y algo tontorrona, es muy buena, cariñosa como ninguna, e inteligente solo cuando quiere. Nos ha dado más de un disgusto con sus excursiones por los alrededores del centro de Madrid y nos ha hecho reír a todos con su forma de ser. Creo que tiene un carácter bastante original y que con esa cara de boba que pone nos ha enamorado a más de uno. Asi es mi Caja de Pandora particular.